El Eterno Femenino
Laura Olivia hernandez
Afrodita anida
en todas las mujeres. Nos arropa una a una con un mítico halo de simbolismo
desde la antigüedad. En el fondo del mito tirita la vida misma. Afrodita emana del mar. Céfiro sopla fuerte, es el
viento sobre el horizonte y hace llover flores. Desprende rosas, jazmines,
violetas, tulipanes… De las entrañas
marineras, espumante nace
Afrodita, la de cabellera dorada, la mujer diosa libertaria, y nos regala a la humanidad a su hijo Eros que une todo lo creado y esparce el Amor a la manera de López Velarde: «bailando
un vals sin fin por el planeta».
Afrodita o Venus, igual que la mar océana en su eterno vaivén, mece la renovación
interminable de la vida. Concebida cuando el titán Cronos castró a su
padre, el dios Urano, los genitales amputados cayeron a la mar y lo fecundaron.
Postraron los dioses la belleza en Afrodita
y ella vive en el alma de todos
nosotros. ¿Acaso no es la belleza búsqueda constante? Es la esencia que nos
mueve a disfrutar de nuestro cuerpo, una puesta de sol, un pétalo con rocío de
la mañana, los ojos de un niño y de un anciano en el instante de un
descubrimiento… Quien insiste en no mirar, es ciego de espíritu.
Mujer…
Puja la soledad
y abre sus piernas
para
darme a la luz
de tu cuerpo.*
Sandro Botticelli
en «El nacimiento de Venus» y «La Primavera », con el
aliento renacentista libera las sensaciones de la creación. Sus colores son una
pálida luz, y en su magnitud nos lleva a nuestro origen primigenio. En
ambos lienzos está Afrodita. ¿Qué imán poderoso enlaza la armonía de la
naturaleza con el ser humano? ¿En quién recae tal poder de belleza, deseo
y realización? Afrodita no es diosa
virgen, le impusieron matrimonio, fue infiel… Después, ella elige a sus amores.
Rosa de Lera en su libro «Reinas, mujeres y diosas»,
hace una separación entre las diosas sometidas y las libertarias. Hera, Deméter
y Perséfone, las sometidas, por ser
madres y esposas. En terreno de libertarias se encuentran
Atenea, Artemisa y Afrodita. Tres nombres con A, de Arte, de armonía, y
de amor… en medio está la diosa Hestia, la sabia consejera. En el panteón
Olímpico estas siete diosas son arquetipo de la psique femenina. De ellas
abrevaron Cleopatra, Juana de Arco, Marie Curie, Flora Tristán, María Callas,
Marilyn Monroe, Tina Modoti, María Antonieta Rivas Mercado, María Izquierdo,
Elena Garro, Rosario Castellanos, Aidé Santa María, ¿Con cuál de ellas se identifica?
Si en el
ambiente fluye un perfume, es el aroma nuestro. Somos nosotras suma infinita
del eterno femenino; inspiración de poetas, músicos, pintores, escultores… los
artistas del mundo antiguo hasta nuestros días.
Tienes en el ritmo de tu ser,
todo el palpitar de
una canción…
Eres la razón de mi existir… mujer**.
Sin Diosas, Libertarias o Sometidas, el mundo sería
tierra seca y gris.